Son parte de los cien escogidos a través del certamen creado por Andrónico Luksic. Además de recibir una suma de dinero para hacer crecer su negocio, obtendrán capacitación.

Cien emprendedores de todo Chile ganaron la versión 2020 del concurso Impulso Chileno. Y cinco de ellos son de la región de Los Ríos. Gracias a este certamen, organizado por Fundación Luksic en alianza con la Corporación Simón de Cirene y la Escuela de Administración UC, recibirán un monto en dinero que les permitirá fortalecer su negocio; pero también podrán obtener asesoría académica, para mejorar sus conocimientos y desempeño como comerciantes.

En la región, los ganadores de la tercera versión de este concurso pertenecen a los rubros de alimentación, textil e inmobiliario. Se trata de Mauricio de la Fuente, dueño del restaurante “El Fundador”; Aldo Romero, de Picamadero Muebles; Anlly Cancino, del Almacén y Boutique Agustina Paz; Marcelo Eltit, de Runna Confecciones y Michael Navarro, de Navarro Fabricación y Montajes. Todos ellos se destacaron por sus ideas novedosas y sus ganas de crecer.

“Este año ha sido muy duro y desafiante para todos, especialmente para las emprendedoras y los emprendedores de todo Chile, que a pesar de todas las adversidades nos han demostrado lo que significa la resiliencia. Son un ejemplo que emociona y que inspira. Y sabemos que hoy más que nunca necesitan mucho apoyo. Por eso, con orgullo premiamos a los 100 ganadores, mujeres y hombres apasionados que trabajan con convicción por sus negocios y a quienes queremos entregarles este impulso académico y económico, para que sigan adelante con fuerza”, dijo Andrónico Luksic al confirmar la premiación.

Este año el 51 por ciento de los ganadores son mujeres y el 70 por ciento proviene de regiones, mientras que el 30 por ciento corresponde a emprendimientos de la región Metropolitana.

Uno de los ganadores es Mauricio de la Fuente, propietario del restaurante El Fundador, ubicado en Luis Damann Asenjo 1034. Y no sólo lo bautizó como “fundador” por su ubicación, sino que también por ser el primer restaurante de ese estilo en el sector. “Caminando por avenida Alemania, en Temuco, vi que muchas casas habían sido acondicionadas y funcionaban como restaurantes. Quise hacerlo porque la necesidad de restaurantes no solamente está en el centro de las ciudades. Los barrios también los necesitan”, contó.

Abrió en mayo de 2019 con una carta basada en preparaciones rápidas como papas bravas, chorrillanas, pichangas, crudos, sandwiches de carne mechada y hamburguesas caseras, además de recetas propias y cervezas artesanales. Le fue muy bien incluso después del estallido social, ya que la gente evitaba ir al centro y lo preferían. Sin embargo, con la pandemia tuvo que acomodarse e implementar delivery.

“Con el dinero de Impulso Chileno quiero acondicionar la cocina para hacer platos preparados y colaciones, además implementar una rica parrilla. Mi objetivo es ampliar la gama de nuestros productos, aumentar nuestra velocidad y llegar a más público. En este momento tenemos una terraza, también quiero terminarla para poder usarla todo el año. Estoy muy contento y agradecido, porque además del monto en dinero me van a hacer un curso que me permitirá conocer más mi negocio. En mi caso me orientarán en la parte contable y tributaria, donde estoy más falto de conocimiento “, explicó. De la Fuente recibirá 4 millones 900 mil pesos.

MUEBLES PERSONALIZADOS

El negocio de Aldo Romero, Picamadero Muebles, surgió en 2015 cuando fabricó una innovadora cuna de colecho para su hijo. Sus conocidos la encontraron tan linda que empezaron a hacerle encargos y en 2017 ya vendían para todo Chile. Compraron una cortadora computarizada para disminuir el tiempo de fabricación de los productos ensamblados y comenzaron a construir un taller en Valdivia. Sin embargo, no alcanzaron a traer la máquina debido a la pandemia, así que hicieron un giro. Pararon la fabricación de su línea ensamblada y comenzaron a fabricar muebles para empresas, closets y cocinas a medida. “Junto a mi esposa nos hemos dedicado full time este año a la empresa. Por eso las ventas aumentaron y se nos ha hecho imposible responder a todos los pedidos, teniendo que rechazar”, dijo.

Con el apoyo de Impulso Chileno planean comprar herramientas para que más trabajadores realicen sus actividades al mismo tiempo, adquirir máquinas más eficientes y retomar la línea de ensamblado. “Con Impulso Chileno pretendemos ser un aporte en la creación de empleos, además de posicionar la marca a nivel local y nacional”, dijo. La empresa, que se caracteriza por la personalización del mobiliario y también por el diseño de muebles inclusivos, se adjudicó cinco millones de pesos.

BAZAR Y BOUTIQUE

El Bazar y Boutique Agustina Paz se encuentra en Paillaco. Su dueña es Anlly Cancino, quien comenzó vendiendo ropa a través de Facebook y llevándola a domicilio en horarios flexibles. Incluso pudieron llegar a otras comunas de la región, como Valdivia, Río Bueno y La Unión. Luego, pudo instalarse con un bazar donde vende abarrotes y ofrece servicios como el pago de cuentas, recargas telefónicas y la venta de bonos de Fonasa. Con la pandemia, retomó con más fuerza la venta a domicilio. “Nuestro negocio es distinto porque estamos a disposición de nuestros clientes, la idea es que sea de ellos más que nuestro”, dijo Cancino. Con el dinero de Impulso Chileno planean digitalizar sus procesos, realizar una estrategia de marketing para llegar a más personas, ampliar la sala de ventas y poder contratar a alguna persona.

RUNNA CONFECCIONES

Hace diez años Marcelo Eltit creó Runna Confecciones, una pyme dedicada a la elaboración de uniformes escolares e institucionales. “Trabajamos para la universidad y los colegios de la comuna de Valdivia y también para comunas aledañas como Los Lagos, Máfil y Mariquina. Tenemos clientes a lo largo de todo Los Ríos”, dijo. E indicó que se caracterizan por la puntualidad, por trabajar con telas nacionales y por su experiencia, ya que desde 2016 se han adjudicado contratos de suministros con municipalidades y otras instituciones.

Pero este año ha sido complicado, por la pandemia. “Nos ha afectado bastante, porque trabajamos principalmente con colegios. Al saber de este impulso nos animamos a participar porque queremos invertir en una máquina bordadora. Si la tuviéramos, ahorraríamos tiempo y podríamos prestar el servicio de bordado a otros comercios”, aseguró.

FABRICACIÓN Y MONTAJES

El negocio de Michael Navarro, llamado Navarro Fabricación y Montajes, se encuentra en Lanco y se dedica a hacer trabajos de mantención industrial, fabricación de estructuras metálicas, de líneas y estructuras de acero inoxidable y de reparación de calderas. “Nuestros principales clientes son transportistas de leche, constructoras y hojalaterías. También apoyamos a distintos contratistas. Lo que hace único nuestro servicio es que podemos estar rápidamente en terreno, evaluar el trabajo oportunamente y así entregar un mejor servicio”, explicó.

Con el dinero de Impulso Chileno quiere adquirir maquinaria para que la empresa sea más autosuficiente y no dependa de otras. Con esto podrían bajar sus tiempos de ejecución y costos, además de contratar a más personas.