• Las finanzas son fundamentales para conocer la rentabilidad del negocio, y planificar y ejecutar de mejor manera los recursos. Ordenarlas ayudará a obtener mayores beneficios del emprendimiento.  

Si un negocio no tiene las finanzas claras ni una planificación establecida, será más complejo calcular las ganancias, costos y tomar decisiones para cumplir los objetivos. Este orden es un elemento fundamental para que el emprendimiento perdure en el tiempo. 

En esta nueva edición de “Emprendimiento al día”, tres mentores de la cuarta versión del programa Impulso Chileno de Fundación Luksic -Pablo Vaillant, María Eugenia Suazo y Cristián Fajre- entregan sus consejos para una mejor administración de los recursos y mantener un orden adecuado en el negocio.

1. El primer paso, es evaluar el negocio. Esto implica realizar una proyección a futuro en que los ingresos más el financiamiento sean superiores a los gastos, y que las utilidades permitan cumplir con el pago de obligaciones financieras, es decir, que el negocio sea rentable.

2. Separar las finanzas personales con las del negocio es crucial para mantener el orden y la línea divisoria entre ambas.  

3. Prestar atención a cada movimiento de dinero. Se debe establecer un flujo de caja o planificación financiera para tener un adecuado control de los gastos y costos de la empresa. Esto es esencial para no generar costos extras que no se pueden sostener. 

4. Con todo anotado, cada gasto e inversión del negocio, el siguiente paso es aprender a leer los datos y buscar oportunidades en ellos para aumentar las ventas y potenciar la rentabilidad del negocio. 

5. Ahorrar. Las ganancias del negocio no son inmediatas, por lo que es indispensable prepararse para estos momentos. ¿Cómo? Cada mes se puede destinar cierta cantidad de dinero para el “colchón” financiero. 

Por último, Cristián Fajre, mentor de Impulso Chileno y gerente de Administración y Finanzas de Manantial, entrega una última recomendación para cuando el negocio comienza una etapa de crecimiento exponencial. “Se suelen incrementar fuertemente las inversiones o gastos en esta fase, ojo con eso sobre todo si nuestra cartera de clientes no está lo suficientemente diversificada. Como dice la canción es preferible ir pasito a pasito”, explica Fajre.